El Brandy Alexander es la variante más cercana a su predecesor, el Alexander; elaborado con ginebra en lugar de brandy. El origen de la nueva mezcla surgió con motivo de una boda real. La unión se produjo entre la princesa María de Windsor y Henry Charles George, Vizconde de Lascelles.
La ciudad de Londres en 1922 fue testigo del enlace y del dulce nacimiento del Brandy Alexander aunque, existen escritos que indican que Hugo Ensslin, en 1915, apuntó la primera versión de este cóctel dentro de su libro de recetas. Brandy, crema de cacao y nata líquida en una deliciosa combinación para templar el cuerpo.
El brandy es una bebida que se obtiene a partir de la destilación del vino. El origen de este aguardiente data del siglo XII, cuando en España se quemaba el vino que no servía para consumir. Tras su destilación, se exportaba a Holanda en barricas de roble donde se le había extraído todo el oxígeno y, así, evitar impurezas.
Su alta graduación siempre ha condicionado la forma en que se bebe, sirviéndose en pequeñas copitas delante de una chimenea o mezclado en fabulosos cócteles para ocasiones especiales.